Trucos para Limpiar la Tapicería: Sofá, Sillas y Sillones

Una correcta limpieza y mantenimiento regular de nuestros asientos (sofá, sillas, sillones, puf…) nos ayuda a mantener su vida útil y aspecto del primer día durante más tiempo. Son piezas que suelen estar expuestas a un uso continuo, manchas accidentales, roces, enganchones, ropa que destiñe, etc. Para facilitarte la tarea vamos a ver qué aspectos debes tener en cuenta para que no se convierta en una pesadilla.  
A la hora de elegir la tapicería…

Uso del asiento. Este factor es básico a la hora de elegir la tapicería. Lo primero que debes tener claro es si va a tener un uso diario o si por el contrario será un asiento de uso ocasional. Es importante conocer las características que ofrece un tejido antes de comprarlo, unos te facilitarán la limpieza y mantenimiento y otros no tanto.
Niños o mascotas. Si tienes niños o mascotas en casa no podrás evitar las manchas accidentales, que pongan los pies, que se llene de pelos… Por suerte, tenemos en el mercado tejidos antimanchas, con tratamientos que repelen el agua, otros que impiden la fijación del pelo del animal, ignífugos y todo sin renunciar al diseño. Su aspecto nada tiene que envidiar a los tejidos tradicionales, con una amplia gama de colores, agradables al tacto y fáciles de limpiar. Puede que el precio sea ligeramente superior al de un tejido convencional, pero a la larga merece la pena.
Nuestra recomendación. Elije un tejido práctico, de fácil limpieza (lavado a máquina) y que no se arrugue mucho. Los tejidos sintéticos son una buena opción, puedes usar lavadora, muchos admiten secadora; suelen estar compuestos por fibras naturales como el algodón que facilita la transpiración, y un mayor porcentaje de fibras artificiales como el acrílico y el poliéster que ayudan a que no se formen tantas arrugas tras el lavado.
A la hora de su limpieza y mantenimiento…

Mantenimiento. Mantener limpia la tapicería de los asientos no es tan complicado. Pasa una vez a la semana el aspirador por las juntas, así evitas que se acumule polvo y suciedad. Ten la precaución de utilizar la boquilla adecuada para tapicería (por lo general un cepillo de cerdas suaves) las otras pueden dañar el tejido. Sacude ligeramente los cojines y si tienes fundas, con un lavado cada 15 días bastará.
Limpieza. Es recomendable realizar una limpieza profunda una vez al mes aunque el sofá no tenga manchas aparentes. Debes desenfundar todos los cojines y asientos (si el fabricante lo permite), pasar el aspirador por la estructura (delantera, trasera y bajos), las juntas, los asientos, reposabrazos y cojines para eliminar el polvo y suciedad que se incrusta en el tejido.
Desenfundables. Los asientos con tapicería desenfundable son la mejor opción para facilitarte la limpieza. El aspecto es el mismo que el de un sofá o butaca no desenfundable pero con la ventaja de poder limpiarlo con mayor facilidad.

Fundas. En nuestra opinión, las fundas son el aliado perfecto para mantener la tapicería de tu sofá, sillas y sillones como el primer día. Todo son ventajas, protegen la tapicería, facilitan la limpieza y se pueden personalizar (elegir un tejido a gusto y confeccionarlas a medida o bien, comprar hechas) dando un toque diferente a la estancia. ¡Huyamos de la monotonía y mejoremos el 'chi'!

Tipo de tejido. En función del tipo de tejido debes emplear un tratamiento de limpieza u otro. Unos tejidos permiten el lavado a máquina mientras que otros son más delicados y requieren limpieza en seco:

• Lona: Es un tejido resistente, se puede lavar a mano con agua y jabón para platos o en la lavadora.
• Algodón: Se puede lavar en la lavadora máximo a 30º. Es un tejido que puede encoger por lo que te recomendamos un lavado en frío. Dependiendo de la composición (si es 100% algodón o no) permite el uso de secadora, revisa antes la etiqueta del fabricante o consulta al tapicero.

• Lino: Puedes lavarlo a máquina, utiliza un centrifugado suave y programa de lavado para tejidos delicados. No admite secadora.
• Terciopelo o imitaciones: Sea de algodón o viscosa, es un tejido delicado que requiere lavado a mano con agua templada y jabón neutro. Eliminar el exceso de agua puede resultar complicado, no los debes retorcer podrían quedar marcas. Un truco que funciona muy bien es ayudarte de una toalla. Coloca el terciopelo en el centro, enrrolla sobre sí mismo y ahora sí, puedes retorcerlo ligeramente para eliminar el exceso de agua. No se puede usar secadora y para tenderlo es recomendable extenderlo sobre un tendedero sin utilizar pinzas ni colocar todo el tejido sobre una misma cuerda para evitar marcas. Si tienes espacio, extiéndelo al aire libre sobre una superficie plana.

Poliéster: Es un tejido fantástico se puede lavar en lavadora, no encoge y apenas se arruga, aunque necesita centrifugado corto. 
Sedas y brocados: Son tejidos muy delicados, te recomendamos limpieza en seco. En el mercado puedes encontrar diferentes productos para limpiar la tapicería. Lleva cuidado con este tipo de productos, suelen ser bastante agresivos y pueden llegar a desteñir o dejar manchas blancas en la tapicería. Te recomendamos probar sobre una pequeña zona que no se vea mucho antes de utilizarlo directamente sobre la mancha o la tapicería. No permite el uso de secadora.
 
Piel: Es un tejido natural que requiere ciertos cuidados. Para su limpieza debes utilizar un paño suave humedecido en agua y dejar secar durante un tiempo. Después, aplicar crema protectora, dejar secar y más tarde abrillantar con un paño de lana. Nunca utilizar disolventes (alcohol, acetona, amoniaco) ni productos abrasivos para las manchas pueden dañar la piel. El sol y las fuentes de calor directo (estufas, radiadores, lámparas potentes...) tampoco son recomendables. Mantén tus asientos de piel a 50 cm de la fuente de calor.
Polipiel: Es un tejido artificial similar a la piel pero que requiere menos cuidados (no necesitas aplicar crema protectora). También puedes limpiarlo con un paño humedecido o con un limpiapolvo convencional no agresivo. Evita la exposición directa al sol y las fuentes de calor cercanas; lleva cuidado con los botones, cremalleras u otros elementos punzantes pueden dañar la tapicería.
Charol: Si estás pensando en dar un toque Retro a la decoración este tejido es ideal a la vez que muy fácil de limpiar. Sólo necesitas pasar un trapo suave humedecido en agua y secar bien después con un trapo seco.
 
¿Te han resultado útiles estos consejos? ¿Conoces más trucos 
para limpiar la tapicería?

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