En España la baja por maternidad dura 16 semanas desde el
parto, lo que significa que, trascurrido ese tiempo, la mamá ha de
volver al trabajo si desea mantener su salario en las mismas condiciones
(existen las reducciones de jornada y las excedencias). Muchas
familias, llegado ese punto, se plantean varias opciones para dejar al
bebé al cuidado de terceros, pero ¿de quién?
Existen varias posibilidades, todas ellas con sus ventajas e inconvenientes.
•Guardería.
Plantea dos desventajas principales en el aspecto material. Si es
pública, las plazas son difíciles de conseguir. Si es privada, suelen
ser caras. Dependiendo del tiempo que esté el bebé/niño oscilará entre
los 200 (4 horas) y 700 (8 horas). Varían los precios mucho dependiendo de las ciudades.
En el aspecto emocional tiene una desventaja clarísima, especialmente
para la madre: el sufrimiento que suele provocar dejar a tu hijo tan
pequeño en manos de extraños. El bebé también acusa la falta de su madre
o de un entorno de cuidado exclusivo como el que tiene en el hogar.
Deja de ser único y por tanto recibirá menos atenciones de afecto como
estar en brazos, ser cogido cuando llora…todo ello, importantísimo para
su correcto desarrollo cerebral.
•Cuidadoras en casa.
Tener una persona en casa de suma confianza es una opción que muchas
madres aceptan porque, a pesar de seguir sufriendo por la separación del
bebé, al menos saben que su hijo está en su entorno y no sufrirá tanto
el cambio. El inconveniente aquí puede residir en que la inmensa mayoría
de las mujeres que son contratadas para tal fin no están preparadas
para ello, es más, suele combinarse que sean señoras de la limpieza con
el cuidado de los niños. Claro que si son madres, y muchas lo son,
tendrán la experiencia necesaria para cuidar del bebé. Lo más importante
en estos casos es cerciorarse de las recomendaciones que traiga (hablar
con sus antiguos empleadores) y asegurarse de que es una persona
responsable y de fiar, que tiene iniciativa y, sobre todo, que sea
cariñosa con los niños, que no les grite, que no les pegue…Los niños
pequeños no saben contar si los maltratan pero sí es un buen síntoma que
no debemos pasar por alto si comprobamos que el niño rechaza a quien lo
cuida. Generalmente los niños son muy generosos y justos en sus afectos
y quieren a quienes los quieren y rechazan a quienes no los quieren.
•Abuelos. Sin
duda es la opción que casi todas las madres prefieren porque les
proporciona una inmensa tranquilidad saber que sus hijos están en las
mejores manos. ¿Quién va a querer a tu hijo más que tú si no es tu madre
o la madre de tu pareja? El problema de esta opción es el abuso. Muchos
abuelos están ya cansados y cuidar a un niño pequeño todos los días
requiere de salud, buena forma y muchas ganas. Además no reciben (casi
nunca) ninguna retribución económica. Lo hacen por amor a su familia, a
sus nietos. Es muy importante recordar que si ésa es la opción, los
padres deberán estar siempre atentos a las necesidades económicas de sus
hijos: pañales, biberones, leche artificial (si la toman) comida,
medicamentos, ropa para cambiarse, útiles de aseo específicos para
ellos…ya que muchos abuelos tienen pensiones exiguas y los gastos de un
peque suelen ser elevados. Es muy importante satisfacer siempre esas
necesidades para no caer en abusos ya que muchos abuelos, por vergüenza,
pueden no reclamar ese dinero y pasar ellos necesidades. Todos los que
son padres saben que sólo en pañales el gasto ronda entre los 40 y 60
euros mensuales.
Ventajas y desventajas de la escolarización
Hemos querido preguntar a unas expertas en psicología
infantil cuáles son las principales ventajas de que un niño sea
escolarizado. Obviamente no es lo mismo un bebé de 4 que un niño de 16 meses
ya que el primero no notará en su evolución el lugar donde está y sí
notará los abrazos más cercanos si no está en la guardería. Pero la cosa
cambia cuando ya caminan y empiezan ese fabuloso mundo que es el
aprendizaje.
Cristina Muñoz Prieto y Yohanna Hignio Chima, del
gabinete Soluciones psicopedagógicas. SPS (629 44 55 70
solucionespsicopedagogicas.sps@gmail.com) nos lo cuentan:
Los niños reciben más estimulación desde temprana edad, lo que se traduce en un mayor desarrollo de diferentes ámbitos del desarrollo evolutivo:
•Adquieren progresivamente autonomía en sus actividades habituales (comer solo, ponerse el abrigo, desplazarse…).
•Desarrollan sus capacidades afectivas, empezando por el autoconcepto y la valoración de sí mismo de la cual surge la autoestima.
•Derivado de lo anterior desarrollan la empatía,
es decir, el conocimiento de los otros y a desarrollar afectos para con
los demás adquiriendo así pautas de convivencia y de relación social
(aprender a hacer turnos para jugar o para hablar, rutinas de
actividades…
•Desarrollan habilidades comunicativas
en diferentes lenguajes y formas de expresión, es decir, no solo el
lenguaje oral sino también el corporal, gestual, plástico a través de
los dibujos…Habilidades logicomatemáticas como es el aprendizaje de los
números.
•En las escuelas infantiles pueden detectarse tempranamente posibles trastornos de conducta o discapacidad física, sensorial o psíquica.
•De la misma forma reciben una atención temprana y una estimulación precoz para poder solucionar dichas dificultades.
•También existen ventajas para los padres, ya que se
habitúan al sistema educativo, conocen en qué consiste, aprenden
rutinas, adquieren pautas y reciben apoyo a través del asesoramiento de
profesionales especializados.
•Es importante que los centros de educación infantil tengan un Proyecto Educativo reconocido por la Consejería de la Educación de la Comunidad a la que pertenezcan, y que los padres se aseguren de que así es.
Entre las desventajas debemos destacar que el niño, al escolarizarse en edad temprana, contrae más enfermedades de
lo que lo haría con el cuidado en casa, desventaja que se ve
equilibrada por la ventaja de la inmunización. Y, quizás la desventaja
más importante es que el niño se separa de su entorno más cercano, el
familiar, algo que le puede provocar estrés, tristeza, irritabilidad… Y
muy importante, observar la evolución de nuestros hijos cuando acuden a
la guardería muy pequeños y valorar, si no son capaces de superarlo,
otras opciones menos agresivas o intentarlo más adelante cuando sea más
«maduro» emocionalmente hablando.
Lo más importante, como siempre, es ser tolerante
con las opciones de las otras mamás. Recordad que muchas mujeres optan
desde el principio por la guardería porque no les queda otra opción y
apoyar siempre a la mamá en la decisión que tome porque siempre lo hará
con el amor y la dedicación de la que (casi) todas las mujeres lo hacen
cuando tienen hijos.
http://www.abc.es/familia-padres-hijos/20130202/abci-guarde-rias-201302011117.html
No hay comentarios:
Publicar un comentario